Aguilar de Campoo
El casco histórico de la villa, a orillas del Pisuerga, está declarado conjunto histórico artístico y es una de las puertas principales de entrada a la Montaña Palentina. Famosa localidad por su tradición industrial galletera, es cabecera de comarca con un gran patrimonio histórico, cultural y natural.
Su castillo, que data de entre los siglos XII al XV, fue probable origen de la villa medieval y la domina desde lo alto, siendo un magnífico mirador natural. A sus pies se encuentra la iglesia románica de Santa Cecilia, del siglo XII, con una exquisita riqueza decorativa tanto en su torre como en el interior, cargada de capiteles historiados sobre los que destaca la representación de la matanza de los inocentes.
El monasterio de Santa Mª La Real, construido entre los siglos XII y XIII, llama la atención por su claustro cisterciense. La iglesia alberga el Centro Expositivo de Arte y Territorio Rom.
La colegiata de San Miguel Arcángel, rodeada por los soportales de la Plaza de España, conserva su huella románica en su portada, aunque principalmente se trata de un edificio gótico del siglo XV con magníficos conjuntos escultóricos en su museo sacro.
Ubicado en una casona del siglo XVII, el Museo de Ursi recoge buena parte de la obra del escultor de Villabellaco, Ursicino Martínez. Principalemente, piezas de madera con su original visión sobre los deportes, la minería o las propias formas de los olmos.
La importancia medieval de Aguilar se confirma en la multitud de palacios blasonados de las familias nobles a lo largo del casco histórico y en sus puertas medievales de acceso a la villa.
Entre sus parajes naturales a destacar, el embalse y playa de Aguilar y, dentro del Geoparque de las Loras, el cañón de la Horadada.